Es importante que tengamos muy claro, que ser padres no es solo traer hijos al mundo, eso cualquiera lo puede hacer, cuantos casos vemos actualmente de padres que abandonan a sus bebes en la banca de un parque o en la puerta de una casa, o casos de violencia intrafamiliar.
Para ser padres, además de satisfacer las necesidades básicas de los hijos, como es comida, vestido y vivienda, debemos educarlos tanto física como mental y espiritualmente, y con educarlos no me refiero solo a mandarlos a la escuela, si no, a escucharlos, observarlos, y brindarles apoyo y cariño incondicional, hacerles saber que cuentan con nosotros en cualquier momento de su vida, inculcarles los valores, principios y virtudes que les ayudara a salir adelante en las diversas situaciones que se les presenten.
El educar a un hijo es un trabajo que requiere de mucha paciencia y sobre todo de mucho amor, y la mejor forma de educar a un niño es predicando con el ejemplo, recordemos que los niños aprenden mediante la imitación, son muy observadores y todo lo que ellos ven que nosotros como adultos hacemos, se vera reflejado en su forma de ser; cuantas veces no hemos visto a una niña vestir la ropa y las zapatilla de su mamá, o al niño creando un mundo como el imagina el trabajo de su papá, por esto debemos empezar a educarlos siendo congruentes en lo que decimos y lo que hacemos.
Es importante también hacerles saber que ellos tienen características que los hacen diferentes a los demás, características que los hacen únicos y que son esas pequeñas cosas las que más amamos de ellos.
Esas pequeñas cosas que los hacen diferentes a cualquier otra persona son las que bebemos ayudarles a desarrollar a través de la constancia, es como cuando queremos adquirir el hábito de la lectura, solo lo lograremos si nos esforzamos leyendo un poco a diario.
Pues bien, la orientación vocacional es parte de la educación y por esto se elije una carrera como base del desarrollo personal y a través de la cual compartiremos con los de más los valores y principios adquiridos en la educación familiar.
Para ser padres, además de satisfacer las necesidades básicas de los hijos, como es comida, vestido y vivienda, debemos educarlos tanto física como mental y espiritualmente, y con educarlos no me refiero solo a mandarlos a la escuela, si no, a escucharlos, observarlos, y brindarles apoyo y cariño incondicional, hacerles saber que cuentan con nosotros en cualquier momento de su vida, inculcarles los valores, principios y virtudes que les ayudara a salir adelante en las diversas situaciones que se les presenten.
El educar a un hijo es un trabajo que requiere de mucha paciencia y sobre todo de mucho amor, y la mejor forma de educar a un niño es predicando con el ejemplo, recordemos que los niños aprenden mediante la imitación, son muy observadores y todo lo que ellos ven que nosotros como adultos hacemos, se vera reflejado en su forma de ser; cuantas veces no hemos visto a una niña vestir la ropa y las zapatilla de su mamá, o al niño creando un mundo como el imagina el trabajo de su papá, por esto debemos empezar a educarlos siendo congruentes en lo que decimos y lo que hacemos.
Es importante también hacerles saber que ellos tienen características que los hacen diferentes a los demás, características que los hacen únicos y que son esas pequeñas cosas las que más amamos de ellos.
Esas pequeñas cosas que los hacen diferentes a cualquier otra persona son las que bebemos ayudarles a desarrollar a través de la constancia, es como cuando queremos adquirir el hábito de la lectura, solo lo lograremos si nos esforzamos leyendo un poco a diario.
Pues bien, la orientación vocacional es parte de la educación y por esto se elije una carrera como base del desarrollo personal y a través de la cual compartiremos con los de más los valores y principios adquiridos en la educación familiar.
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